Capítulo 3
- ¡Bien hecho!- Ambos muchachos chocaron las manos, y luego Kaito apoyó el bajo en la base.- Debes admitir que eso estuvo fenomenal, creo que con un poco de práctica este tema podría llegar a ganar el concurso…
- ¿Cuál concurso?- Entonces miró a Meiko, quien estaba mirando fijamente a la chica de pelo gris.
- Kaito, trae al resto.- Ordenó con la misma fiereza de Haku sorprendiendo al joven de pelo azul, pero aún así obedeció.
En pocos instantes reaparición Neru acompañada por el famoso Dell, quien aún conservaba un chupetín en la boca, también vino acompañada por Gumi, un chico de aproximadamente dieciocho y una joven de quince años.
Esta última se trataba de Teto Kasane, mejor amiga de Neru Akita. Su cabello era corto y dividido en dos coletas enruladas, lo sorprendente era el tono rosado de este igual al de sus ojos. Para resumir su vestimenta, era exactamente el estilo de Miku sólo que con los colores gris y rosa, respectivamente.
El otro joven era sin duda idéntico a Kaito, solo que su cabello era rojo al igual que sus ojos. Además, vestía el mismo atuendo reemplazando el azul por rojo.
- Len-san, ellos son; Teto Kasane, Akaito Shion quien como podrás ver es el hermano de Kaito, ella es Gumi Megpoid y finalmente, este es Dell Honne.- Anunció Haku, Meiko apretó los dientes al ver al chico de rojo este le devolvió la mirada.
- Akaito… no esperaba verte, pensaba que no planeabas venir este año.- Él suspiró al ver a lo que ella se refería, sus miradas se encontraron por unos instantes. Parecía que estaba por decir algo cuando de golpe se abrió la puerta, Kaito, Miku y un par de personas más ingresaron a la habitación.
Uno de ellos era una joven de cabello largo hasta la cintura, color rosa claro, y ojos azules. Vestía una especie de chaleco negro con decoraciones en dorado que le hacía juego con su larga pollera, con un tajo al costado. Calzaba unas largas medias negras que le llegaban por arriba de las rodillas, y tenían un borde dorado, y botas de cordón no tan largas del mismo dorado. Ajustados a sus muñecas, poseía un par de largos brazaletes de color amarillo y negro.
El chico que se mantenía a su lado, tenía cabello lila que le llegaba hasta el piso sujetado en forma de colita mediante una extraña cruz. Sus ojos eran celestes y llevaba un extraño uniforme samurai color blanco, celeste y lila, y unas botas negras. Sin duda lo más extraño y llamativo que había visto Len hasta el momento.
- Ellos son Luka Megurine, Gakupo Kamui, Miku Hatsune… ¿Dondé está Rin-chan?- El joven les dedico una mirada de saludo, sin prestar mucha atención, pero entonces la visión de la joven de dos colitas hizo que se sonrojara y tuviera que apartar la vista. Luka le murmuró algo en el oído a su amiga diciéndole que la joven llegaría en pocos instantes, ya que se había retrasado en el desmantelamiento de su equipaje.
- Len Kagamine.- Dijo sin más, poniéndose de pie.
- Muy bien, sólo quiero que todos sepan que eres muy talentoso y estoy segura de que disfrutarás tu estadía en nuestro grupo… ¿Qué dices?- Dijo Meiko. Sin darse cuenta, Len había terminado en el medio de la habitación y tenía que decidir que lado tomar si el grupo de la izquierda o el de la derecha. Ambos le miraban con sonrisas y promesas de alegría, con excepción de Dell que mantenía una mirada seria y serena.
- Onii-chan…- Lloriqueó la chica de pelo verde saltando a los brazos del samurai, el cual la atrapó con cara de sorpresa. Luka apartó la mirada molesta, no le agradaba que trataran bien a Gakupo.
- ¿Qué ocurre?
- Ustedes ya tienen un nuevo miembro… ¿Podemos quedarnos con este?- Dijo con una perfecta voz de niña. Había sido hermanastra de Gakupo desde que era muy pequeña, y siempre le había funcionado ese truco para conseguir lo que quisiera, con excepción de que su hermano se quedara en el mismo grupo que ella.
- Pues…
- ¡Cállate! No me importa si quieres ayudar a tu hermana, y ser manipulado… ¡Pero no interferirás con nuestro grupo!- Exclamó Luka furiosa y enrojecida, sin duda no podía encontrar a alguien que odiara más que a Gumi.
- Oh… ¿Otra vez con los celos Nee-san?- Se rió abrazando a su hermano con mayor fuerza, el rojo de la chica aumentó.
- Eto…- Todas las miradas se dirigieron a rubio que miraba la escena con confusión y algo de temor. Gumi soltó a su hermano, y se alejó de nuevo hacia su bando… no sin antes sacarle la lengua a Luka de forma burlona.
- ¡Cuando te ponga las manos encima juro que te voy a…!- Gakupo tuvo que sujetarla para que no se abalanzara sobre la joven de cabellos verdosos.
- Como veraz Len-kun, muchos de aquí están locos… Pero no te preocupes, yo soy normal…- Neru le estiró la mano de forma amistosa, mientras su amiga de dos coletas rosadas sonreía a su lado.
- Te divertirás mucho… ¿neh?- Agregó la otra con voz infantil.
- Así es Teto, ven…- El joven empezó a acercarse, estaba con tomar la mano de la rubia cuando alguien profirió un suspiro… rompiendo así el silencio, y con él lo que podría haber sido una escena decisiva.
- No voy a obligarte, pero de verdad nos gustaría que te nos unieras… Es genial hacer nuevos amigos.- Dijo Miku, después de todo, ella y Rin eran las únicas nuevas en un grupo de antiguos amigos. Las mejillas de Len se sonrojaron al verla, sin duda era hermosa y parecía tan amable.
Empezó a caminar hacia esa dirección, pero entonces algo saltó del bolso que cargaba la joven… una pequeña y curiosa réplica de madera.
- ¡Ven rápido! ¡Deja de hacer tanto suspenso!- Exclamó asustando al muchacho que retrocedió al verla por el susto.
- ¡Miku! ¡Ya te dije que así asustas a las personas!
- Miren quien habla… ¡Cabeza de alga descompuesta!
- ¡Te aviso que tu tienes el mismo color de pelo que yo!
- Que raro… ¡Porque yo no soy tan tonta!- La joven la miró furiosa.
- ¡No soy tonta, tonta!- Ambas empezaron a discutir infantilmente, dejando al chico plasmado ante su tonta idea de que ella era seria y madura.
- Kaito haz algo…- Ordenó Meiko antes de dirigirse al muchacho horrorizado.- Len… créeme no es tan malo como parece…- Pero hasta ahora su grupo parecía estar compuesto por una Luka sanguinaria, y una Miku demente e infantil… y quién sabía que otras ideas se le habían formado en la mente a aquel rubio.
Entonces la puerta se abrió, una joven de cabellos rubios ingresó pero se quedó helada frente a la imagen del muchacho al tiempo que este también le dirigía una mirada de sorpresa. Ambos caminaron lentamente hasta posicionarse frente a frente, entonces con sumo cuidado ambos levantaron una palma y la apoyaron frente a la del otro. Simplemente parecían dos reflejos… El original y la visión del vidrio del sexo opuesto.
- ¿Quién eres?- Dijeron a la vez, ambas voces sonaron en perfecta armonía haciendo que el corazón de los presentes se acelerada.
- Tú… tú… ¿Eres la gemela de Len-kun?- Se animó a preguntar Neru, cortando la tensión que cubría el ambiente.
- No, no le había visto… nunca…- Admitió sin quitarle los ojos se encima. Ambos se miraban con curiosidad y fijeza, como si frente a ellos estuviera el más grande de los misterios.
- Pero saben, ambos tienen el mismo apellido.- Informó Meiko recuperando el habla, la habitación se llenó de murmullos de confusión.
- Díganme sus apellidos.- Ordenó Dell autoritario, dejando en claro que tenían que decirlo al mismo tiempo para demostrar que era verdad.
- Kagamine.- Respondieron, ahora de forma desentonada.
- Quizás los separaron al nacer…- Supuso Haku después de una silenciosa meditación, la mitad del gentío la miraron como si estuviera loca y hubiera visto demasiadas telenovelas argentinas XD Ok, no.
- Será mejor que llames a sus padres…- Sugirió Luka mientras todos asentían a la vez. Meiko se puso en acción y marcó a ambos números, pero lamentablemente el de la madre daba como no disponible, y el del padre ocupado.
- Dudo que mamá responda, ahora mismo debe encontrarse en el avión.- Informó Len pálido pero haciendo un esfuerzo por mantener la voz.
- Creo que sería mejor que tomen un poco de oxígeno, y quizás un poco de azúcar…- Comentó Kaito empezando a sonreír, Meiko enarcó una ceja al tiempo que este sonreía.- Vayamos a tomar unos… ¡Helados!
Meiko se golpeó la frente al tiempo que Akaito, ambos se miraron con un leve sonrojo al notar que habían realizado la misma acción.
- Muy bien, llévate a los gemelos a la heladería. Los demás regresen a sus actividades diarias.- Ordenó con voz de liderazgo, el resto del grupo “Jazmín” observó a Haku a la espera de órdenes.
- Eto… hagan lo mismo.- Decidió, a fin de cuentas eso era lo más prudente. Dell asintió revelando el paquete de golosinas que llevaba escondidos, Haku pudo ver con como por un instante él sonreía.
- ¿Puedo ir con ellos?- Teto miró sorprendida a su amiga al tiempo que esta se sonrojaba.- Me gustaría poder hablar un poco con Len-kun
- Pues si Neru-nee va, yo también.- Decidió sonriéndole a su amiga en forma de ánimo.
- Muy bien… ¿Alguien más quiere venir? ¿Akaito?- El individuo se sonrojó al notar que había sido descubierto observando a Meiko.
- Nah… yo, paso. Tengo… cosas que hacer…- Dijo escapándose de la habitación, aunque en realidad no tenía ningún asunto pendiente. Haku suspiró cerrando sus ojos y se giró para hablar con Gumi con los ojos aún cerrados.
- ¿Y que hay de ti?- Abrió sus ojos para encontrarse con lo que le faltaba. De un lado, tirando del brazo izquierdo de Gakupo, se encontraba Gumi y del otro, tirando del brazo derecho, estaba nada más ni nada menos que Luka. Decidió dejarlos ya que sabía que eso iba a demorar…
- Ven conmigo Nii-san, quiero que me des tu opinión sobre unos vestidos que me compré…- Dijo tironeándolo hacia su dirección.
- ¡Ya fue suficiente! ¡Él tiene que ayudarme a arreglar la recepción!- Se quejó enviándolo hacia su lado.
- Pero lo pueden hacer más tarde… ¿neh, oniisan?
- ¡Aún así! ¡Suelta!
- ¡No! Además… Puedes buscarte a alguien más, mientras yo paso un largo… y agradable rato con mi onii-san…- Insinuó.
- ¡Bah! ¡Ni que me importara!… pero como dije necesito de su ayuda…
- Pídesela a Kaito, o a cualquier otro alumno… Yo me quedaré con él…
- ¡Ya suéltalo niña malcriada!
- ¡No! Y para agregar… creo que mi onii-san preferiría pasar tiempo con su linda muchachita que con su malvada y abusiva amiga…
- ¡No soy amiga de este sujeto!- Objetó.
- ¿Lo ves? Ni siquiera son amigos… déjamelo a mí, y tu vete tranquila… Sino… ¿Qué tal si le hacemos elegir?- Sugirió soltándolo, haciendo que se precipitara y cayera sobre Luka, quien lo apartó con fuerza.
- No, porque él sabe cual es su deber…- Contestó mirando con odio a la joven de cabellos verdes.
- Tienes miedo de que él te rechace…- Se burló haciendo que la muchacha enrojeciera, estaba por responder cuando notó que alguien se había escapado.
- ¡Gakupo…!- Su grito de furia se pudo oír desde fuera del edificio, varios pájaros alzaron vuelo ante la potencia del estallido. Sin duda, nadie querría estar cerca de Gakupo cuando Luka lo encontrara.
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